Asco…

No hay otra palabra para definir lo que he sentido al leer esa noticia:

Asco por @jgamago en #Reinventarse

No hay nada más lamentable que la ignorancia, y lo que está claro es que esta empresa, este chico de la organización del evento, no sólo no tenía cerebro, era/es un ignorante y un malnacido, si no que por desgracias, es un ejemplo de lo que aún ocurre en muchas situaciones con las personas con una discapacidad. Desconocimiento. Ignorancia. Miedo. Todo junto, a la vez, provocan estas situaciones tan lamentables como patéticas inverosímiles en pleno S.XXI. Pero por desgracia, aquí están.